jueves, 18 de diciembre de 2014

Por estas fechas


Fue una vecina la que dio el aviso. Al llamar a la policía dijo que el gato de los del tercero, de pelo atigrado y carita de pena, llevaba maullando sin cesar desde hacía dos días. Y que eso le había mosqueado bastante, por lo inusual.
Al llegar se encontraron las persianas bajadas, penumbra espesa y ese olor dulzón que según las novelas del género siempre anuncia la muerte. Un piso de dos habitaciones, salón, cocina y un baño. En ambos dormitorios, el de matrimonio y el que evidenciaba ser el del crío, con un papel azul hasta media pared y una cenefa con dibujos de nubes, los cajones estaban abiertos y vacíos. Durante todo el recorrido que los agentes hicieron por la vivienda, un gato les persiguió algo inquieto, maullando y colándoseles por entre las piernas. El tintineo del cascabel, junto con su desesperante quejido, rompía burlonamente el silencio clínico de aquella inspección ocular.
En el salón se encontraron el televisor encendido, con niebla en la pantalla. Junto al reproductor del dvd uno de los agentes encontró la carátula abierta de una película de Frank Capra, y entre los dedos rígidos del hombre que yacía desangrado vena abajo en el sofá, una carta de despedida firmada por una tal Anabel, que terminaba con estas dos frases: "Y ahí te quedas con tu puto gato, mamón. Feliz Navidad.".
Lo primero que ordenó el sargento fue que le pusieran agua al minino, a ver si conseguían callarlo de una vez por todas.


Relato publicado en "La suave piel de la anaconda" (Talentura, 2012).

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo tenía medio olvidado así que me he ido enseguida a tu libro para ver en qué capítulo estaba integrado. Un truculento y excelente relato para felicitar las navidades, jejejejeje

JC

Rochies dijo...

Ha sido fílmico. Corto pero muy visual. También lograste que oyera los maullidos del gato.
Un abrazo

José Luis Martínez Clares dijo...

Magnífica antítesis la de Capra y ese cadáver desangrado. El gato, sin duda, no consiguió sus alas. Un abrazo

Santi S. dijo...

Tan cruel como soberbio. A mí me encanta, bueno, ya me encantó cuando lo leí en su día.
Felices fiestas.

Anónimo dijo...

Un dvd a estas alturas.... Un desterrado tegnologico era el tipo, imagino que como yo y otros muchos.

Y los gatos, joer que tendrán los gatos. En todo misterio de altura hay siempre un gato.

El malo con aires de conquistador, suele acariciar uno mientras planea destruir el mundo. Y todo psicopata que se precie, sus primeros pasos los dio torturando un gato. En fin, pobre animalucho. Cuídate y me ha gustado

Vicente Corrotea dijo...

Cuando uno lee y, si puede, vuelve a leer, es probable que sobren frases enteras. Acá no. Es lo justo para mantener la tensión y que todo está bien. Incluyendo la referencia a la Navidad.
Felices fiestas, Raúl.

Miguel dijo...

Soberbio el relato. Me ha encantado.Un relato conciso y concluyente.

Feliz navidad, paisano.

Anónimo dijo...


Me gusta que el sargento ponga agua al minino, aunque lo haga para callarlo. Humaniza todo un poco y da una leve luz de esperanza entre tanto desamparo.
Como cada año, Raúl, un te, chocolate y café para desearte Feliz Navidad

Anónimo dijo...


Me gusta que el sargento ponga agua al minino, aunque lo haga para callarlo. Humaniza todo un poco y da una leve luz de esperanza entre tanto desamparo.
Como cada año, Raúl, un te, chocolate y café para desearte Feliz Navidad

abril en paris dijo...

La realidad en éste caso supera la ficción o ¿es al revés?..ah..creí que todo era cierto.
¡Qué pena de gato!

¡Qué todo te vaya bien amigo, este año se nos va..a ver que historias nos trae el que viene!

Saludos

Anónimo dijo...

Oh pequeño
emperador sin orbe,
conquistador sin patria,
mínimo tigre de salón, nupcial
sultán del cielo
de las tejas eróticas,
el viento del amor
en la intemperie
reclamas
cuando pasas
y posas
cuatro pies delicados
en el suelo,
oliendo,
desconfiando
de todo lo terrestre,
porque todo
es inmundo
para el inmaculado pie del gato.

Extracto "Oda al gato" Pablo Neruda.

ethan dijo...

Relato serpenteante entre la vida, la muerte, el desamor y con toque cinéfilo. Por tanto muy de la anaconda (libro que circula por mi familia).
Abrazos y unas muy felices fiestas.

Javier Ximens dijo...

Me gusta esa forma de narrar que te lleva de la mano sin tirones por el texto. Abrazos.

lopillas dijo...

Es que me encantas. Te he pedido por reyes, me da tanta pereza comprar por internet.
Ya te contaré.
Espero que estés bien que hace tiempo no sabemos de ti.
Besitos muchos.

Anónimo dijo...

Simplemente, felices fiestas y que el próximo año, todo sea como debería de haber sido este. Lo demás, aleatorio en estas fechas. Cuidate