A mi tambien me gusta la palabra libélula. Y siento tu divorcio en tan malos términos de pareja. ¿Has probado la palabra DOS?, se te llena la boca con ella y no tiene J incordiando. Precioso.
Me encanta cómo escribes. Eres sensible y lo demuestran amando a las palabras. Yo, te confieso, estoy enamorado desde hace tiempo del adjetivo Armonioso... y lo nuestro creo que va para rato...
Te dejo dos poemas sobre ese placer de saborear la palabra libélula, repito, libélula...
La libélula intenta en vano posarse sobre una brizna de hierba
Matsuo Bashô
la observo testaruda intenta en vano posarse sobre una brizna de hierba que se mueve al compás del aire que respiras sin embargo yo podría posarme en el filo de tu sonrisa y hacer equilibrios en tu omóplato si quemara las naves de mi miedo y contuviera el aliento aquél que mueve la hierba para que la libélula no se pose
Qué casualidad!! el otro día con mi taller de relatos, estuvimos hablando de la importancia de las palabras. Una compañera tenía que cambiar la palabra gusano por otra... ¿sabes cuál propuse yo? libélula
Hola, ola de mar.. Diría que este relato tiene algo que no había visto hace mucho en lo que escribes. O quizá quiera verlo simplemente. Me parece mágica la forma en la que has llevado el relato hacia algo íntimo, una historia triste, contada como un cuento. Un beso, del Aire
¡Brillante, brillante, brillante! Cuando acabé de leerte me daban ganas de aplaudir (no lo hice porque en casa la gente anda dando cabezadas sesteantes, jajaja) Me encantó. Es de esos relatos que apetece releerlos (como los poemas), porque con cada lectura ves más detalles. Todo un placer.
Es genial. Es diferene a todo lo que te he leído hasta ahora. Creo que es una metáfora acertadísima, pues al fin y al cabo, las personas sólo somos palabras para los demás. Muy bueno!!!
Precioso revoloteo de palabras. Yo tengo por talismán una pequeña libélula. A mi me suena a una libertad sutil, ligera. Por cierto tambien me gusta mucho la palabra talismán. Un beso
Qué bueno, Raúl. Me ha encantado esa pasión por las palabras. Has elegido palabras muy bonitas y siempre es difícil con ellas pues todos las ven y sienten envidia jeje. Al final, acaban arrebatándolas. Un abrazo.
Libelúla, muy bella. Pero la de Pareja, su descripción me ha de-j-do sin palabras, Perfe-cuasi-ta, y ¿quién no ha tenido atravesada esa palabra alguna vez en su vida?
¿Se puede decir tanto en tan poco espacio?...amigo Raul, en tí se cumple el postulado de Gracian, "Lo bueno si breve, dos veces bueno". Muchas gracias por esos juegos malabares del lenguaje. Un abrazote.
Me dejas anonadada. ¡Era eso lo que me pasaba! Si no me haces caer en la cuenta, nunca habría puesto nombre a mi relación con ... me cuesta pronunciarla... es su nombre.
Me sorprendes siempre con una buyena historia, me encantó el relato. Al inicio parecía un comentario, se volvió un relato. De una palabra hiciste una historia, es genial, besos
También soy bastante palabrariego, y nunca las olvido si las he amado de verdad. Me pasó con "opalescencia": duró mucho, pero en algún momento nos venció la rutina, ya sabes. Ya no la uso, es cieto, pero a veces la dibujo con el pensamiento. Éramos tan jóvenes...
la J siempre jodiendo... si tienes ese tan buen gusto con las palabras pronto estarás conjugando otros verbos, encontrarás nuevas palabras para nuevos poemas...
¡Que impacto leer hoy tu blog!, en serio. Porque yo también estoy enamorada de la palabra libélula desde hace años. Estoy enamorada de muchas palabras pero libélula es la más. Por ejemplo: estoy enamorada también de volvoreta (mariposa, en gallego), arume (la hoja del pino en gallego), vento (viento, en gallego)… Pero además de estar enamorada de “libélula”, también estoy enamorada de Hector Alterio desde hace años… me encanta este hombre y su voz. Lo ví una vez en directo, representado “El túnel”… En fin. Que entiendo muy bien tu escrito, incluso la parte final. Biquiños Raúl,
Raúl, las palabras a veces también se esconden, vuelan igual que la libélula ¿Por qué digo esto? porque te dejé el día 22 un comentario de las palabras que también tienen un sentido especial para mi, compartiendo la belleza de la tuya y disfrutando de tus letras. No encuentro mi comentario. No debería de aparecer,seguro, pero intento compartir contigo la belleza que encuentro en la palabra "artesa" que me remonta a una niñez, a olor a pueblo en vacaciones y a una abuela vestida de negro.Castilla. Un beso
Bellísimo juego con las palabras, tu manera de usarlas, de enamorarte de ellas. Permíteme decirte que tú no te quedarás sin palabras.Ellas se enamoran de ti por tu manera de mimarlas en la escritura. Hoy, además me has deslumbrado con la imagen que ilustra tu blog. Dos actores impresionantes y una escena inolvidable en El hijo de la novia.
Bellísimo, querido Raúl. Yo de pequeña me enamoré de "pastel " y "muñeca" . Es obvio que sólo pude materializar en mi vida lo dulce ,porque muñeca jamás fui. Un beso, es cierto que cada vez escribes más hermoso.
No te lo creeras, pero yo me enamoro de las palabras, llevo tiempo enamorada de "alfeizar", entre otras. También las hay que me hacen reir, y mi hija dice que no hay palabra que le provoque mas risas que " chabacana", y es que estoy segura de que las palabras tienen alma propia.
He pasado por aquí muchas veces, por el cine... Pero hoy me he quedado enganchada a este buenísimo texto que has escrito sobre las mágicas y adoradas palabras. Y, como es contagioso, te tenía que decir que yo me enamoré de la palabra libélula leyendo a Carmen Martín Gaite. Comprendo que la jota de pareja no te gustara, es delgada y no nos deja acomodarnos en su regazo para bajar la guardia.
Blog abierto en 2006.
Autor de 3 libros de relatos: ELEFANTIASIS, LA SUAVE PIEL DE LA ANACONDA, y GLÓBULOS VERSOS y de 3 novelas: UN VIAJE SOLO PARA HOMBRES, ANTES. ENTONCES. NUNCA y POR MI GRAN CULPA, obra ganadora del XXIV Premio de Novela Negra Ciudad de Getafe 2020. Aficionado al cine, buscador de cosas,... En fin.
49 comentarios:
Zumalacárregui.
Me adivinas el pensamiento, Raúl.
Zumalacárregui.
Cada día que pasa, escribes mejor.
Un abrazo.
Libélula, frágil, redonda, etérea, ingrávida, sutil...Abraza su liquidez.
A mi tambien me gusta la palabra libélula. Y siento tu divorcio en tan malos términos de pareja.
¿Has probado la palabra DOS?, se te llena la boca con ella y no tiene J incordiando.
Precioso.
Me gusta mucho!
Esto de ...No sé qué ocurrió...,
Besos
Ludmila.
No me gusta como nombre, pero sí pronunciarlo.
Cosas que tiene uno que cada día está peor.
Me encanta cómo escribes. Eres sensible y lo demuestran amando a las palabras. Yo, te confieso, estoy enamorado desde hace tiempo del adjetivo Armonioso... y lo nuestro creo que va para rato...
Un abrazo.
Te dejo dos poemas sobre ese placer de saborear la palabra libélula, repito, libélula...
La libélula
intenta en vano posarse
sobre una brizna de hierba
Matsuo Bashô
la observo
testaruda intenta en vano posarse
sobre una brizna de hierba
que se mueve al compás
del aire que respiras
sin embargo yo podría
posarme en el filo de tu sonrisa
y hacer equilibrios en tu omóplato
si quemara las naves de mi miedo
y contuviera el aliento
aquél que mueve la hierba
para que la libélula no se pose
Pepa Mas Gisbert
Me suena.....
Qué casualidad!! el otro día con mi taller de relatos, estuvimos hablando de la importancia de las palabras. Una compañera tenía que cambiar la palabra gusano por otra... ¿sabes cuál propuse yo? libélula
Besicos
Hola, ola de mar..
Diría que este relato tiene algo que no había visto hace mucho en lo que escribes. O quizá quiera verlo simplemente.
Me parece mágica la forma en la que has llevado el relato hacia algo íntimo, una historia triste, contada como un cuento.
Un beso, del Aire
¡Brillante, brillante, brillante! Cuando acabé de leerte me daban ganas de aplaudir (no lo hice porque en casa la gente anda dando cabezadas sesteantes, jajaja)
Me encantó. Es de esos relatos que apetece releerlos (como los poemas), porque con cada lectura ves más detalles.
Todo un placer.
Me gusta como suenan tus palabras, naves viajeras que recorren la nube en busca de nuevas letras. Un saludo
Precioso y calmo.
Con cariño. Lo
Es genial. Es diferene a todo lo que te he leído hasta ahora.
Creo que es una metáfora acertadísima, pues al fin y al cabo, las personas sólo somos palabras para los demás.
Muy bueno!!!
María
las libélulas vuelan, como los sentimientos, posándose acá y allá. Será porque no tienen jota.
Un beso
Precioso revoloteo de palabras.
Yo tengo por talismán una pequeña libélula. A mi me suena a una libertad sutil, ligera.
Por cierto tambien me gusta mucho la palabra talismán.
Un beso
Qué bueno, Raúl. Me ha encantado esa pasión por las palabras. Has elegido palabras muy bonitas y siempre es difícil con ellas pues todos las ven y sienten envidia jeje. Al final, acaban arrebatándolas. Un abrazo.
Muy bueno, Raúl. Debo confesarte que la palabra libélula te dejó por mí. Ahora soy yo la que disfruto de sus suaves fonemas. Lo siento.
Como la vida misma...
Me gusta
Un beso
Libelúla, muy bella. Pero la de Pareja, su descripción me ha de-j-do sin palabras, Perfe-cuasi-ta, y ¿quién no ha tenido atravesada esa palabra alguna vez en su vida?
Yo va-rias, para que son-rías ;-)
Besos
La magia de las palabras que escoges, no se pierden ni deletreándolas.
Al cerrar los ojos se saborean los sonidos.
¿Se puede decir tanto en tan poco espacio?...amigo Raul, en tí se cumple el postulado de Gracian, "Lo bueno si breve, dos veces bueno".
Muchas gracias por esos juegos malabares del lenguaje.
Un abrazote.
Estoy en relaciones con la palabra pachasco. O eso creo porque ni siquiera se si es una palabra.
Me dejas anonadada. ¡Era eso lo que me pasaba! Si no me haces caer en la cuenta, nunca habría puesto nombre a mi relación con ... me cuesta pronunciarla... es su nombre.
Acabo de perder la virginidad.
Muy bueno. Lo estoy volviendo a leer. Tiene magia, y un gran final. De maestro.
Me sorprendes siempre con una buyena historia, me encantó el relato. Al inicio parecía un comentario, se volvió un relato. De una palabra hiciste una historia, es genial, besos
También soy bastante palabrariego, y nunca las olvido si las he amado de verdad. Me pasó con "opalescencia": duró mucho, pero en algún momento nos venció la rutina, ya sabes. Ya no la uso, es cieto, pero a veces la dibujo con el pensamiento. Éramos tan jóvenes...
Cuestión de palabra, un buen titulo para un buen escrito. Te felicito, pues me gusto demasiado la idea de este cuento. Un saludo grande, Raúl.
Bueno, pues no le falta aún diccionario ni nada... Avísame cuando llegue a rododendro...
Me sumo a Josep, cada día mejor.
Abrazos.
Creo que las palabras te quieren, Raúl. Por eso es tan de agradecer que las compartas.
Así, además, el sentimiento cierra el círculo de afectos.
Un admirado abrazo.
No sabría yo decir si es mas o menos hiperrealista que tus anteriores relatos. Lo que si e atrevo a decir es que es buenísimo, raúl.
A seguir de fuesta.
JC
Me ha encantado, nada es para siempre todo tiene su momento.
Cuando te pones cinematográfico eres muy bueno, cuando te pones sensible eres superior, pero cuando le añades este toque surrealista ya te sales
la J siempre jodiendo...
si tienes ese tan buen gusto con las palabras pronto estarás conjugando otros verbos, encontrarás nuevas palabras para nuevos poemas...
un abrazo.
Muy bueno, Raúl. Yo me suelo enamorar de las esdrújulas, son mi debilidad.
Un saludo.
Marian
La palabra preferida de mi compañera de "pupitre" es libélula. Curiosa coincidencia...
Ya verás como con libélula, que es palabra esdrújula, duras más...
¡Que impacto leer hoy tu blog!, en serio. Porque yo también estoy enamorada de la palabra libélula desde hace años. Estoy enamorada de muchas palabras pero libélula es la más. Por ejemplo: estoy enamorada también de volvoreta (mariposa, en gallego), arume (la hoja del pino en gallego), vento (viento, en gallego)…
Pero además de estar enamorada de “libélula”, también estoy enamorada de Hector Alterio desde hace años… me encanta este hombre y su voz. Lo ví una vez en
directo, representado “El túnel”…
En fin. Que entiendo muy bien tu escrito, incluso la parte final.
Biquiños Raúl,
Raúl, las palabras a veces también se esconden, vuelan igual que la libélula ¿Por qué digo esto? porque te dejé el día 22 un comentario de las palabras que también tienen un sentido especial para mi, compartiendo la belleza de la tuya y disfrutando de tus letras. No encuentro mi comentario. No debería de aparecer,seguro, pero intento compartir contigo la belleza que encuentro en la palabra "artesa" que me remonta a una niñez, a olor a pueblo en vacaciones y a una abuela vestida de negro.Castilla.
Un beso
Bellísimo juego con las palabras,
tu manera de usarlas, de enamorarte de ellas.
Permíteme decirte que tú no te quedarás sin palabras.Ellas se enamoran de ti por tu manera de mimarlas en la escritura.
Hoy, además me has deslumbrado con la imagen que ilustra tu blog.
Dos actores impresionantes y una escena inolvidable en El hijo de la novia.
Un abrazo y gracias por partida doble.
Me encanta!
Pase a saludar!
Un abrazo,
Yeli
Bellísimo, querido Raúl.
Yo de pequeña me enamoré de "pastel " y "muñeca" .
Es obvio que sólo pude materializar en mi vida lo dulce ,porque muñeca jamás fui.
Un beso, es cierto que cada vez escribes más hermoso.
No te lo creeras, pero yo me enamoro de las palabras, llevo tiempo enamorada de "alfeizar", entre otras. También las hay que me hacen reir, y mi hija dice que no hay palabra que le provoque mas risas que " chabacana", y es que estoy segura de que las palabras tienen alma propia.
Que placer descubrirte.
Me ha encantado tu post, volveré por aquí con más tiempo.
A mi también me gustan las palabras, llevo unos días dándole vueltas a "díscola", que bien me suena!!
Beso
Hola.
Yo no tengo blog. Me han hablado del tuyo en el Facebook, y también de tu libro.
Escribes de una forma excelente.
José Ignacio M.
He pasado por aquí muchas veces, por el cine...
Pero hoy me he quedado enganchada a este buenísimo texto que has escrito sobre las mágicas y adoradas palabras.
Y, como es contagioso, te tenía que decir que yo me enamoré de la palabra libélula leyendo a Carmen Martín Gaite.
Comprendo que la jota de pareja no te gustara, es delgada y no nos deja acomodarnos en su regazo para bajar la guardia.
Un placer leerte.
Saludos
Fabuloso. Es normal que todas las palabras te adoren. Nadie las mima como tú!!!!
Un abrazo.
Lo peor no son las palabras que agotamos. Sino las que no osamos pronunciar.
Besos...
Final de cereza, espectacular... que hermoso es el castellano, Bone día señorazo.
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