Pobre Baxter: no se da cuenta de que, además, es un iluso: no le dejas, Raúl, mucha esperanza; otro día, le das más aire, no vaya a perderse en el hueco del ascensor donde vive su amada.
A mí, lo que me encanta de él, son sus espagueti boloñesa. Es una pena que no nos pueda invitar más a menudo a los amigos, y menos ahora, desde que, por fin, le han ascendido. Porque ya le han ascendido, ¿no lo sabías?
No se la de veces que he visto la película y ahora tu me das otro sorbo de ella, que decirte como siempre un placer saborear sus lineas caballero. Besos
Y yo que pensaba que la chica se llamaba Kubelik... C.C. Baxter es uno de los mejores personajes jamás dibujados dentro del guión más perfecto jamás escrito. Un personaje que atesora, sobre todo, candor, ingenuidad, y que se redime de ello, que madura, que se hace hombre por amor. Tremendo. Excelente homenaje, amigo.
Para mi la protagonista es la ascensorista, el es un pringao del ascenso. El que esté resfriado, es que el estrés baja las defensas, (Me hizo gracia) Un beso.
¡Es qué solo lo podía interpretar Jack Lemmon! y mi querida Shirley...sino me equivoco es "El Apartamento" de Wilder.. (en fin sino es así, no pasa nada) No sé si existen hombres como Baxter, pero me resulta muy encantador, enamorado de la chispeante, bella e inteligente, Shirley...Hola Raúl, mis mejores deseos y éxitos cn tu Elefantiasis.
Te dejo un abrazo enorme lleno de aromas de verano,
Ay, esta vez ha sido fácil, porque nombras a Baxter y además hablas de su apartamento y la fotito es reveladora: Jack lemmon y Shirley McLaine...así que es...El Apartamento, del genial Billy Willder, jeje. Como siempre, encantadores tus relatos inspirados en el cine clásico. Y cambiando de tema: ¿sabes por qué algunos de mis poemas te parecen coplillas? pues porque tienen métrica y rima consonante y eso les produce cadencia y musicalidad. Los que escribo libres, sin métrica y con escasa rima, ya no provocan ese efecto. De todos modos me estoy preparando p'a tonadillera, hale, que ahora que la Pantoja está en la trena ha quedado un huequecillo libre. ¡¡Sonrío, jiji!!
Vacaciones!!!me he apañado un mes de vacaciones pobres, es decir, gazpacho y libros. ¿Donde puedo comprar, que no sea por internet, Elefantiasis?. Si no me equivoco son también relatos.
Esta la he pillado! Te pedía siete novias para siete hermanos, pero esta la he pillado. Confío en que el celuloide no haga trampas y el bueno del asmático consiga al fin decir NO.
¿Qué tiene esta película que da para tanto? Yo le dediqué dos post y me parece que ante tu magnífico relato,ya tengo nuevas ideas,sobre todo cuando ando resfriado.
Vaya, por primera vez desde que te leo sé perfectamente de qué película hablas. Pero eso es lo de menos, porque tus relatos valen por sí solos. Magnífico homenaje, magnífico texto y genial el final.
Tu texto podría se perfectamente un guión para otra película. Yo no he tenido en cuente otras referencias cinematográfica,(aunque indudablemente la hay) Simplemente te he leído y he imaginado tu película. Saludos y buen fin de semana de cine (entre otras cosas)-
Imposible no reconocer este clasico. Además la vi hace muy poco tiempo. Leyéndote como te leo de forma habitual, y sabiendo lo bien que describes la mentalidad femenina, hubiera pensado que le ibas a dar mayor relevancia al personaje femenino, y sin embargom tu cuento se sustenta en el magnífico personaje de Lemmon.
La verdad que me da pena el hombre de tan tonto que es, todos se aprovechan..., y el intenta llegar a algo que jamás conseguirá por ser tan bueno e intentar agradar a todos. Es una gran película.
En cada oficina hay uno de ellos, en un lugar en donde trabajé lo llamábamos "El asistonto del patrón"... a él le fue mal, no ascendió...ahora que lo pienso no era mala gente. Un besito.
Castigo divino por su mansedumbre? A veces me pregunto si Dios se molesta cuando alguien no sabe defenderse o imponerse aunque sea de la manera mas justa.
A menudo los resfriados y la tontería van irremediablemente unidas. Qué grande es EL APARTAMENTO. Y tu texto se acerca bastante al nivelazo del filme de Wilder.
Me encanta la ultima frase. Ahora estoy deseando volver a ver la pelicula. Muy grande Billy Wilder. Al conocer al viejo Baxter es imposible no identificarse con el. Luego se le coge cierta mania, por su mediocridad y su incapacidad para trascender el mundo en el que vive, de las que ni siquiera el se da cuenta. Y luego recuerda uno aquel verso de la cancion de John Lennon: "no es un poco como tu yo como yo?" Un saludo
Mi risueño Raúl, te he dejado en mi blog un pequeño regalo, te copio el enlace para que, si lo deseas, pases a recogerlo cuando gustes y puedas. Un besito y muy feliz finde, corazón.
"tan bueno como tonto, tan tonto como ambicioso y tan ambicioso como propenso a los resfriados." Que descripción más concreta de un trepador mediocre. Un abrazo.
Animas a ver (de una vez por todas, y no se habrán cansado mis familiares más viejos de recomendármela) la película de Wilder. No deja de ser una historia muy triste, mucho, tanto como puede serlo esta vida.
Un personaje muy curioso el que creaste, Raúl. Espero poder verlo aparecer de nuevo en otra historia tuya. Es cierto que la poesía es criptica, pero, según mi opinión, es eso la que la hace tan particular; no sería lo mismo si se expresara directamente.
"Comprendo al protagonista, yo estoy enamorado de la dependienta de una pequeña zapatería de barrio y ya he comprado más zapatillas de las que podré usar nunca. La veo y la emoción me provoca estornudos. Ella supondrá que mi apellido es Baxter, salvo por esta evidente falta de ambición."
Esa idea del resfriado como castigo está muy extendida. Algunas enfermedades parece que son culpa nuestra si las adquirimos. Uno se resfría en noviembre, como es natural, y admira a la ascensorista en cualquier época del año. Pero tal vez estuviera más tiempo con ella si reservara el apartamento para sí mismo en el día libre de la chica. Ah, no, que el chico es tonto. Esa enfermedad parece que nunca es culpa nuestra y que tampoco tiene cura.
Este "apartamento" dio pie a hacer una genial película. Disfruto cada vez que la veo. Y no sé si él es un tonto o un listo que se ha pasado de listo. A mí me da un poco de pena.
Has aprovechado la oportunidad que te daba su 50 aniversario. Está claro. La peli es buenisima, y yo estoy de acuerdo con el perfil literario que le sacas al personaje de Baxter.
Raúl, desde que conozco este blog siempre me he preguntado como haces para envasar garndes historias en píldoras. Es mucho trabajo, lo sé. He oído mucho de tu libro, y ciertamente la portada me gusta mucho. Parece un poster de película del primer Lynch. Felicidades,
A ésta sí que la vi hace poco. La síntesis de tu frase final es brillante... je. Y (aclaro) mis estornudos actuales están mucho más relacionados con la ola polar que atraviesa mi región que con mis ambiciones de ascenso. Un abrazo.
La soledad con ambición es menos soledad. O si eres tonto y ambicioso pero eras más tonto te quedas con la chica. Estupenda la escena de la oficina vista con todas las mesas iguales perfectamente colocadas. salut
Si el pobre Baxter amanece con un resfriado de caballo entonces debe ser muy tonto (siguiendo la secuencia de logica que aparece al final).
Un excelente resumen de una vida aburrida, de perseguir metas solo por perseguirlas. Tal vez su amor pueda ayudarle a salvarse, o tal vez simplemente la aburra. Que pena, tiene un gran reto por delante.
Pobre Baxter: no se da cuenta de que, además, es un iluso: no le dejas, Raúl, mucha esperanza; otro día, le das más aire, no vaya a perderse en el hueco del ascensor donde vive su amada.
ResponderEliminarUn abrazo.
A mí, lo que me encanta de él, son sus espagueti boloñesa. Es una pena que no nos pueda invitar más a menudo a los amigos, y menos ahora, desde que, por fin, le han ascendido. Porque ya le han ascendido, ¿no lo sabías?
ResponderEliminarNo se la de veces que he visto la película y ahora tu me das otro sorbo de ella, que decirte como siempre un placer saborear sus lineas caballero.
ResponderEliminarBesos
Una fabulosa película e igual de fabulosa, la actuación. Un deleite
ResponderEliminarrecordarla en tus palabras.
Un abrazo
BB
Y yo que pensaba que la chica se llamaba Kubelik...
ResponderEliminarC.C. Baxter es uno de los mejores personajes jamás dibujados dentro del guión más perfecto jamás escrito. Un personaje que atesora, sobre todo, candor, ingenuidad, y que se redime de ello, que madura, que se hace hombre por amor. Tremendo.
Excelente homenaje, amigo.
Para mi la protagonista es la ascensorista, el es un pringao del ascenso.
ResponderEliminarEl que esté resfriado, es que el estrés baja las defensas, (Me hizo gracia)
Un beso.
No soy aficionado al cine clásico pero me encanta cómo te metes en el personaje.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Es qué solo lo podía interpretar Jack Lemmon! y mi querida Shirley...sino me equivoco es "El Apartamento" de Wilder.. (en fin sino es así, no pasa nada) No sé si existen hombres como Baxter, pero me resulta muy encantador, enamorado de la chispeante, bella e inteligente, Shirley...Hola Raúl, mis mejores deseos y éxitos cn tu Elefantiasis.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo enorme lleno de aromas de verano,
Naia
Vete a saber si el constipado no es una somatización de algo que esté por ahí debajo.. igual es alergia a su estatus...
ResponderEliminarBesicos
Ay, esta vez ha sido fácil, porque nombras a Baxter y además hablas de su apartamento y la fotito es reveladora: Jack lemmon y Shirley McLaine...así que es...El Apartamento, del genial Billy Willder, jeje. Como siempre, encantadores tus relatos inspirados en el cine clásico. Y cambiando de tema: ¿sabes por qué algunos de mis poemas te parecen coplillas? pues porque tienen métrica y rima consonante y eso les produce cadencia y musicalidad. Los que escribo libres, sin métrica y con escasa rima, ya no provocan ese efecto. De todos modos me estoy preparando p'a tonadillera, hale, que ahora que la Pantoja está en la trena ha quedado un huequecillo libre. ¡¡Sonrío, jiji!!
ResponderEliminarFeliz verano.
ResponderEliminarPor cierto, gracias siempre por tus visitas.
Pásalo bien.
Vacaciones!!!me he apañado un mes de vacaciones pobres, es decir, gazpacho y libros. ¿Donde puedo comprar, que no sea por internet, Elefantiasis?. Si no me equivoco son también relatos.
ResponderEliminarMira que me gusta esa pareja de actores.Ella, siempre la dulce.
ResponderEliminarY él, en su perfil de tontillo buenazo.
Qué peliculón, sin duda, y qué buen homenaje...
ResponderEliminarSi Wilder leyera tu sinopsis, seguro que rodaba una película. Estupendo texto.
ResponderEliminarJeje, qué película más fantástica... tanto como Baxter.
ResponderEliminarY es que como diría Sabina:
ResponderEliminarAsí estoy yo sin ti
Como Buster en El Apartamento
Así estamos sin el dios Wilder, huerfanos de cine, de ironía, de crudeza, de ternura....y todo a la vez.
Esta la he pillado! Te pedía siete novias para siete hermanos, pero esta la he pillado. Confío en que el celuloide no haga trampas y el bueno del asmático consiga al fin decir NO.
ResponderEliminarMe enciendo un cigarrillo, leo y simplemente disfruto, que no es poco.Un relato genial para una pelicula tambien genial.
ResponderEliminar¿Qué tiene esta película que da para tanto? Yo le dediqué dos post y me parece que ante tu magnífico relato,ya tengo nuevas ideas,sobre todo cuando ando resfriado.
ResponderEliminarVaya, por primera vez desde que te leo sé perfectamente de qué película hablas. Pero eso es lo de menos, porque tus relatos valen por sí solos.
ResponderEliminarMagnífico homenaje, magnífico texto y genial el final.
Besos
Tu texto podría se perfectamente un guión para otra película. Yo no he tenido en cuente otras referencias cinematográfica,(aunque indudablemente la hay) Simplemente te he leído y he imaginado tu película.
ResponderEliminarSaludos y buen fin de semana de cine (entre otras cosas)-
Imposible no reconocer este clasico. Además la vi hace muy poco tiempo.
ResponderEliminarLeyéndote como te leo de forma habitual, y sabiendo lo bien que describes la mentalidad femenina, hubiera pensado que le ibas a dar mayor relevancia al personaje femenino, y sin embargom tu cuento se sustenta en el magnífico personaje de Lemmon.
Besossss
María.
Me da lástima, un día de estos debería hacer algo x el mismo, para no enfermarse, ascender de puesto y salir con la asensorista...
ResponderEliminarun saludo
La verdad que me da pena el hombre de tan tonto que es, todos se aprovechan..., y el intenta llegar a algo que jamás conseguirá por ser tan bueno e intentar agradar a todos.
ResponderEliminarEs una gran película.
Besos.
En cada oficina hay uno de ellos, en un lugar en donde trabajé lo llamábamos "El asistonto del patrón"... a él le fue mal, no ascendió...ahora que lo pienso no era mala gente.
ResponderEliminarUn besito.
Castigo divino por su mansedumbre? A veces me pregunto si Dios se molesta cuando alguien no sabe defenderse o imponerse aunque sea de la manera mas justa.
ResponderEliminarQuizas algun dia lo sepa
Alberto Q.
ResponderEliminarhttp://traslaspuertas.wordpress.com/
A menudo los resfriados y la tontería van irremediablemente unidas. Qué grande es EL APARTAMENTO. Y tu texto se acerca bastante al nivelazo del filme de Wilder.
Saludotes
Me encanta la ultima frase. Ahora estoy deseando volver a ver la pelicula. Muy grande Billy Wilder.
ResponderEliminarAl conocer al viejo Baxter es imposible no identificarse con el. Luego se le coge cierta mania, por su mediocridad y su incapacidad para trascender el mundo en el que vive, de las que ni siquiera el se da cuenta. Y luego recuerda uno aquel verso de la cancion de John Lennon: "no es un poco como tu yo como yo?"
Un saludo
Esta película destila ternura entre las nauseas. Intemporal...
ResponderEliminarY de ella, mejor ni hablamos.
ResponderEliminarExcelente película, y como siempre, un texto genial.
ResponderEliminarAbrazos
Es un trepa que nos envuelve en su simpatia para solidarizarnos con él, que finalmente se redime por amor......maravillosa...maravillosa......
ResponderEliminarYa "alguien" dijo que Wilder era dios
Brío y ardor en las venas de ese narrador…
ResponderEliminarun gusto!!!!!
Mi risueño Raúl, te he dejado en mi blog un pequeño regalo, te copio el enlace para que, si lo deseas, pases a recogerlo cuando gustes y puedas. Un besito y muy feliz finde, corazón.
ResponderEliminarhttp://maytedalianegra.blogspot.com/2010/07/premio-dardos-que-juan-antonio-comparte.html
"tan bueno como tonto, tan tonto como ambicioso y tan ambicioso como propenso a los resfriados."
ResponderEliminarQue descripción más concreta de un trepador mediocre.
Un abrazo.
Brillante Raúl, tu escritura me mueve, simplemente me mueve.
ResponderEliminarAbrazos :)
Animas a ver (de una vez por todas, y no se habrán cansado mis familiares más viejos de recomendármela) la película de Wilder. No deja de ser una historia muy triste, mucho, tanto como puede serlo esta vida.
ResponderEliminarUn personaje muy curioso el que creaste, Raúl. Espero poder verlo aparecer de nuevo en otra historia tuya.
ResponderEliminarEs cierto que la poesía es criptica, pero, según mi opinión, es eso la que la hace tan particular; no sería lo mismo si se expresara directamente.
Un saludo grande.
"Comprendo al protagonista, yo estoy enamorado de la dependienta de una pequeña zapatería de barrio y ya he comprado más zapatillas de las que podré usar nunca. La veo y la emoción me provoca estornudos. Ella supondrá que mi apellido es Baxter, salvo por esta evidente falta de ambición."
ResponderEliminarMagnífica tu forma de dibujar perfiles.
Un abrazo, D. Raúl, tengo que pasarme más a menudo por su cine. Avíseme cuando ponga usted algo de Tarantino. Saludos, amigo.
ResponderEliminarEsa idea del resfriado como castigo está muy extendida. Algunas enfermedades parece que son culpa nuestra si las adquirimos.
ResponderEliminarUno se resfría en noviembre, como es natural, y admira a la ascensorista en cualquier época del año. Pero tal vez estuviera más tiempo con ella si reservara el apartamento para sí mismo en el día libre de la chica.
Ah, no, que el chico es tonto. Esa enfermedad parece que nunca es culpa nuestra y que tampoco tiene cura.
ja ja ja ...qué bueno lo del dilema del picadero. Pues me cae bien el buenazo ambicioso Baxter.
ResponderEliminarsaludo
Este "apartamento" dio pie a hacer una genial película. Disfruto cada vez que la veo. Y no sé si él es un tonto o un listo que se ha pasado de listo. A mí me da un poco de pena.
ResponderEliminarUn abrazo.
Desde Escucho atentamente te ha sido concedido el premio Dardos.
ResponderEliminarEspero que te agrade y pases a recogerlo.
Hoy sólo paso por aquí, porque como piense en tu Baxter además, no sé cómo termina el día...
ResponderEliminarUna película que me encantó cuando la vi, tanto como tu relato. Te superas cada vez.
ResponderEliminarBesosss
Me has picado y creo que volveré a verla un día de estos, Raúl.
ResponderEliminar:-)
Has aprovechado la oportunidad que te daba su 50 aniversario. Está claro.
ResponderEliminarLa peli es buenisima, y yo estoy de acuerdo con el perfil literario que le sacas al personaje de Baxter.
J.C.
Raúl, desde que conozco este blog siempre me he preguntado como haces para envasar garndes historias en píldoras. Es mucho trabajo, lo sé.
ResponderEliminarHe oído mucho de tu libro, y ciertamente la portada me gusta mucho. Parece un poster de película del primer Lynch.
Felicidades,
Hola Raúl!
ResponderEliminarMagnifico! como suele sucederme no he visto la pelicula, mas la historia que cuenta es cautivante!
Agradezco tus visitas, que son un verdadero placer!!
Un abrazo desde Costa Rica!
Mary
A ésta sí que la vi hace poco. La síntesis de tu frase final es brillante... je.
ResponderEliminarY (aclaro) mis estornudos actuales están mucho más relacionados con la ola polar que atraviesa mi región que con mis ambiciones de ascenso.
Un abrazo.
Vaya, hoy el lorito el primer y yo la última, como siempre..;-)
ResponderEliminarQué peli y qué relato. No sé con cual quedarme, bueno, hoy es que estoy derrochona. Con los dos!
Un beso, Raúl
La soledad con ambición es menos soledad. O si eres tonto y ambicioso pero eras más tonto te quedas con la chica.
ResponderEliminarEstupenda la escena de la oficina vista con todas las mesas iguales perfectamente colocadas.
salut
Mi amigo...
ResponderEliminarVengo a darte las gracias por el comentario que has dejado por allí... es difícil ese otro mundo, bien complicado...
Beso solidario...
Si el pobre Baxter amanece con un resfriado de caballo entonces debe ser muy tonto (siguiendo la secuencia de logica que aparece al final).
ResponderEliminarUn excelente resumen de una vida aburrida, de perseguir metas solo por perseguirlas. Tal vez su amor pueda ayudarle a salvarse, o tal vez simplemente la aburra. Que pena, tiene un gran reto por delante.
Un saludo.
La frase final es ya todo un relato.
ResponderEliminarLa ambición extrema enfocada desde el subsuelo del autodesprecio... genial (como siempre).
ResponderEliminarRaúl:
ResponderEliminarImpresionante perspectiva de la sala de trabajo.
☺
Raul: Un texto maravilloso! Muy bueno!
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